acerca del pasado

Anoche miraba el programa de Grondona y pensaba ¿seguiríamos discutiendo tanto sobre los 70 si no hubieran existido los indultos y la ley de obediencia debida? Más allá de todo el entramado secreto que hayan tenido la toma de estas decisiones lo cierto es que se hirió a mucha gente que hoy sigue gritando y buscando su identidad, que las secuelas de ese pasado viven entre nosotros y que tendremos que aprender a convivir con ellas, pero no a modo de ancla sino como un punto de partida. Esta bien, tenemos un presidente montonero que hace uso electoral y personal de ellas, pero más allá de eso espero que en el futuro sólo hablemos de esa guerra los 24 de marzo y no todo el año. Pasará el tiempo y sus protagonistas dejarán de estar entre nosotros, por eso debemos comenzar por establecer una ruptura respetuosa y recordar a las víctimas inocentes de esa guerra (nada más que a ellas) con un sentido silencio. En lo personal no creo que hayan aniquilado a una generación que hubiera hecho de este país algo mucho mejor (eso nunca lo sabremos), pero sí que aniquilaron a una generación. Al menos es lo que muchos sentimos al ver a un montón de viejos decrépitos que en ves de quedarse en su casa siguen robando sentados en una banca. Pedimos que se vayan todos pero también caímos en la realidad de que no había gente para ocupar ese lugar. Tenemos un agujero negro y debemos empezar por aceptarlo, parafraseando a Nieztche, debemos hacernos amigos de nuestros fantasmas.