COSAS PENDIENTES

La otra tarde en el programa BASTA DE TODO (lunes a viernes a las 14:00 hs por la METRO 95.1) tiraron una consigna muy interesante para todos los que somos adeptos a la música: ¿Qué recitales te perdiste de ver? Es decir, no se refiere a mirarlos por TV o en el DVD, sino de aquellos a los que te morías de ganas de asistir y por una u otra razón forzosa te tuviste que quedar con las ganas. Eso actuó de disparador e inmediatamente (al mejor estilo Rob Fleming en HIGH FIDELITY) me puse a hacer una lista:

1.       AMNESTY INTERNACIONAL (1988, estadio River Plate. Era muy chico y no tenía con quien ir)

2.       SKID ROW  en Obras sanitarias (vinieron dos veces: al primero no pude ir porque estaba haciendo el servicio militar y al segundo por cuestiones laborales)

3.       THE KILLERS en GEBA (2009, estaba recién operado de hernia)

4.       SPINETTA Y LAS BANDAS ETERNAS (2009, idem ant)

5.       COLDPLAY  en River (2010, No conseguí entrada)

6.       GUNS N´ ROSES  en River la primera vez que vinieron (1992, todavía no sé por qué)

7.       MICHAEL JACKSON en River (1993, estaba haciendo el servicio militar)

8.       HEROES DEL SILENCIO en Doctor Jeckyll (1998, no conseguí entrada)

9.       THE CURE en ferro (1985, era demasiado nene)

Echando un rápido repaso a esta lista puedo ver de manera positiva que no han sido demasiados conciertos ya que he asistido a muchísimos a lo largo de mi vida. Y además tres de ellos han sido muy recientes. Pero sin duda el que más me dolió fue el de Amnesty, más que nada por la actuación de Bruce Springsteen y la E-street band, que no sólo estaba en su mejor momento sino que jamás han vuelto a pisar estas tierras. Hace poco conseguí el DVD de ese concierto, pero así y todo no alcanza. En la actualidad, y con su más de 60 años a cuestas, siguen de gira y suenan bastante dignos, pero que vengan a la Argentina parece imposible. Si se da, sería un sueño cumplido. El de Spinetta  y las bandas eternas ya no volverá a repetirse, fue una especie de cometa Halley. Skid Row está disuelta, el Guns N`Roses original también, Y Jacko is dead. Para los demás todavía hay posibilidades. ¿Y ustedes? ¿Cuál se perdieron?

DÍAS MOVIDITOS

Hace días que no posteo nada. ¿Vagancia? Quizá, pero en verdad hace unos cuantos días que vengo a los tumbos con cosas personales y medio que el tiempo libre (cuando lo tengo) lo uso para otras cosas un tanto más productivas que esto. Y encima ya se termina noviembre y viene fin de año otra vez (sí, otra vez). El número 2011 empezará a estar escrito por todos lados, como si fuera una estrella de rock que llega a nuestras vidas el 31 de diciembre a la medianoche. Sí, ya empezamos, por lo pronto hay que armar el arbolito dentro de poco. ¿Dónde lo pasamos? ¿con quién? ¿Qué vamos a comer? "Los errores no se eligen, para bien o para mal" canta Coti rodeado de Julieta Venegas y Paulina Rubio. Después brindan con Tequila mientras el público aplaude. Ocurre justo en mi TV. Mi hijo mira y yo tengo sueño. Uno extraña ciertas cosas cuando es padre. Dormir, por ejemplo, o tener tiempo. O mirar una película un sábado a la noche. En fin, lo que se extraña es el ocio, ese mismo que en cierto momento nos harta porque pareciera que la vida se basa en la distracción y no en avanzar paso a paso. Lo que disfruto bastante en estos días es el hecho de leer libros digitales en una tableta Android. Es genial. Ayer terminé de leer CAIN de JOSÉ SARAMAGO. Un libro grandioso, ideal para ateos como yo, y también para ciertos creyentes que todo lo discuten. Ahora voy a ver que sigo leyendo. Es parte del ocio.

QUESTION

¿DÓNDE ESTÁN LAS COSAS QUE BUSCAMOS CUANDO LAS NECESITAMOS?

VIVO CERCA DE UN AEROPUERTO TEMPORAL

Nunca imaginé que alguna vez me tocaría vivir cerca de un aeropuerto. Es sólo por un tiempo, un mes si no escuché mal. No es que me haya mudado ni nada de eso, sino que se dio todo lo contrario. Hay obras de infraestructura en Aeroparque y los vuelos se repartieron entre Ezeiza y la base aérea de El Palomar.

Los primeros días fueron un tanto ruidosos pero ahora ya no tanto. Lo loco es ir manejando hasta casa y ver los carteles indicando el camino hacia “El aeropuerto de El Palomar”. Los miro y no puedo evitar pensar en la canción de Calamaro, esa que dice “…mientras por afuera, pasan los aviones, no quiero que se termine, no quiero que me abandones”. Miro a mi hijo cada vez que pasa un avión y nos encontramos en la calle o en el patio. Mira hacia arriba y señala. Se queda mirando hasta que la nave desaparece.  Parece que le gustan los pájaros de acero. Aunque tiene uno de juguete que le regaló la abuela y casi no le da bolilla. Debe ser porque es de plástico, y tiene luces, y hace ruido de avión. Incluso me pongo a pensar en Tatú, el enano de la serie LA ISLA DE LA FANTASÍA cuando decía “…el avión, el avión”.

Los aeropuertos…

“Un amor real es como vivir en aeropuertos”. Charly García – Pasajera en trance.

Es loco yacer en tu cama mientras sobre tu cabeza pasa gente que se va a otro lugar lo bastante lejano como para ameritar tomar un avión. Incluso me pregunto por qué al pensar en los aeropuertos me ocupo más de los que se van que de los que vienen. O los que vuelven.

 

Un sueño y un pasaporte, como las aves buscamos el norte

cuando el invierno se acerca y el frio comienza a apretar.

                                   Jorge Drexler

 

Mientras tanto me agarro del suelo todo lo que puedo. No vaya a ser cosa que por andar volando a la vera del viento me estrelle contra un ala y termine flotando en el atlántico de los sueños perdidos.

 

COSAS MÍAS

Con mi ego sólo tengo celebraciones privadas.

LA MAYOR PARTE DEL TIEMPO

Hoy tengo un día THE MOST OF THE TIME.

Ok, lo voy a explicar mejor.

THE MOST OF THE TIME (en castellano LA MAYOR PARTE DEL TIEMPO) es una canción de Bob Dylan incluida en la banda de sonido de la película ALTA FIDELIDAD. No sé en qué disco de Dylan se encuentra, ni de qué año es y menos que menos lo que dice la letra. Supongo que mucho no me interesa, quizá porque esos datos son cosas muy sencillas de conseguir, demasiado al alcance de la mano, demasiado fácil. Pero el tema me gusta, tiene un tempo lento que de vez en cuando me hace bien escuchar. Y me siento un poco como el clima que crea esa canción. Lento, pesado, monótono. Me hace click en el cerebro y no para de sonar dentro de mi cabeza donde la puedo escuchar como si fuera el único oyente de una audición privada.

 A veces pienso que la tecla repeat de un reproductor de música no es mas que una prolongación de lo que a veces nos sucede en la cabeza. 

¿Y por qué estoy así? No sé. Afuera hay sol y hace poco más de 20 grados. Quizá porque no dormí lo suficiente.  Y hay veces en que no dormir lo suficiente me gusta. Sobre todo si me acosté muy tarde.

La somnolencia es bastante chota en la mañana, ni hablar al mediodía. Pero mejora bastante a eso de las 4 de la tarde. Quizá porque la noche se va acercando. Y no es que vaya a ocurrir algo extraordinario. De hecho la mayor parte del tiempo no sucede.

Tendría que buscar la traducción de ese tema. Aunque sea para decepcionarme. O no, ya que viniendo de Dylan… Aunque a no puedo dejar de pensar que a veces es mejor imaginar lo que nos están diciendo, mejor que entender lo que realmente nos dicen. Pero el día sigue su transcurso y la escena de la película en donde suena esa canción, con Rob Fleming caminado en las calles nocturnas luego de una nueva decepción amorosa acude a mi cerebro. Es que la imagen de un tipo caminando en soledad, melancólico, manos en los bolsillos, la campera de cuero, cuello levantado, la noche…  Es una imagen que fui muchos sábados. Tenía sentido cuando me llevaba el walk-man. Pero nada más. Son sólo 5 minutos. Lo demás se pierde. La mayor parte del tiempo…

Se hace un silencio. La canción suena de nuevo. El día continúa…

ROZITCHNER Y EL PERFECCIONISMO

Ayer leí en el blog de Alejandro Rozitchner (www.100volando.net) algo sobre el perfeccionismo que me encantó , a continuación lo reproduzco:

"El perfeccionismo da una mala versión del cuidado. En vez de cuidar la realización de algo, el perfeccionismo nos dice tené cuidado. Es un cuidado mal puesto, en vez de esmero genera una tensión inhibitoria. Se cuela la idea de que errar sería grave, de que hay que tener mucha cautela y no hacer cualquier cosa porque, si no, sale una chanchada y queda mal. La expresividad, en cambio, entiende que el enchastre es parte inevitable de la creación y que no hay que temerle. Cuidar, sí, luego, cuidar lo que va saliendo y darle forma, esmeradamente elaborar su forma con amor."

Así que bueno muchachas y muchachos creativos... ¡A ENCHASTRARSE! Eso sí, después dejen todo limpio, no vaya a ser cosa que pisen la cascara de banana y cataplum!!!.